Pablo Picasso. Femme assise, robe bleue. Óleo sobre lienzo. Pintado el 25 de octubre de 1939. Precio estimado: de 35 a 50 millones de dólares.
Christie’s subastará un retrato de Dora Maar de Picasso El 15 de mayo de 2017, Christie’s subastará ‘Femme assise, robe bleue’ de Pablo Picasso como pieza estrella de su venta de arte impresionista y moderno (precio estimado: de 35 a 50 millones de dólares)]]>
31 de marzo de 2017, fuente: Christie’s
Pintada el 25 de octubre de 1939, «Femme assise, robe bleue» es un importante retrato de la amante de Picasso, Dora Maar. Pintada en el cumpleaños del artista, justo después del comienzo de la Segunda Guerra Mundial, la obra posee el carácter único, las distorsiones y la tensión que marcan los mejores retratos de Dora. Al mismo tiempo, hay una tierna sensualidad -presente en las formas orgánicas y curvilíneas del rostro- que permite entender la relación entre el artista y su amante.
Dora Maar fue una de las musas más importantes de Picasso. Su aventura con Dora se produjo durante los últimos años de su relación con Marie-Thérèse Walter. Marie-Thérèse había sido joven, rubia y atlética, de carácter dulce. Su relación con Picasso produjo imágenes fluidas y sensuales. En contraste, Dora era un personaje complejo, perturbado, intelectual y creativo, una fotógrafo y una artista en su propio derecho. Fue una compañera de fatigas para Picasso, una voz desafiante, que ya había sido una figura establecida en los círculos surrealistas en el momento en que se conocieron.
Picasso representó a menudo a Dora con sus sombreros característicos, una cualidad que la distingue de forma inmediata entre las musas de Picasso. Estos sombreros añaden a menudo un aire lúdico a las pinturas de Picasso de Dora. También sirven como un contrapeso a la severidad con que representó sus rasgos. Algunos críticos han vinculado las imágenes de Dora específicamente a la tensión causada por la Guerra Civil española y la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, parece que Picasso, cuyas pinturas a menudo funcionaban como un barómetro de su propio estado de ánimo, había encontrado una musa que se adaptaba perfectamente a sus representaciones tensas de ese período. Fue la personalidad de Dora, y un sentido más amplio de inquietud ante la situación en el mundo, lo que Picasso logró expresar en estas pinturas.
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