Izquierda: Richard Avedon, Audrey Hepburn, actriz, Nueva York, 20 de enero, 1967 © The Richard Avedon FoundationDerecha: Andy Warhol, Miriam Davidson, 1965, pintura y tinta sobre lienzo, 203.8 × 204.5 cm. Colección privada
© 2015 The Andy Warhol Foundation for the Visual Arts, Inc. / Artists Rights Society (ARS), New York
Richard Avedon y Andy Warhol en la Gagosian Gallery La Galería Gagosian de Londres presenta la primera gran exposición que muestra juntas las obras de Richard Avedon y Andy Warhol. Del 9 de febrero al 23 de abril de 2016.]]>
Fuente: Gagosian Gallery Londres
El retrato fue un foco común para ambos artistas, e hicieron uso de la repetición y la serialización: Avedon a través del medio reproducible de la fotografía; Warhol en su método de serigrafías en grupo, que le permitió la reproducción consistente de una imagen. Los grabados con plata de Avedon y las serigrafías de vivos colores de Warhol representan de diversas maneras muchas caras conocidas, incluyendo a Marella Agnelli, Bianca Jagger, Jacqueline Kennedy, Marilyn Monroe, y Rudolf Nureyev.
Tanto Avedon como Warhol partieron de un comienzo modesto y tuvieron un enorme éxito comercial, trabajando para las principales revistas en Nueva York, a partir de la década de los 40. Los años 60 marcan puntos de inflexión artísticas de ambos artistas, mientras se alejaban cada vez más del trabajo estrictamente comercial hacia sus estilos independientes y maduros. Las obras de la exposición, que datan desde la década de los 50 hasta la década de los 90, hacen hincapié en temas tan comunes como el poder social y político; la aceptación de las diferencias culturales en evolución; la inevitabilidad de la mortalidad; y el glamour y la desesperación de las celebridades.
En cada galería se yuxtaponen obras que ponen de relieve estos temas, empezando por «La Familia» (1976), una ambiciosa representación conceptual de Avedon de sesenta y nueve personas en el epicentro de la política estadounidense en ese momento, junto con el monumental retrato de Warhol del revolucionario Mao Tse-tung, «Mao» (1972). En ambas obras, poca emoción o expresión se revela en las caras o las posturas de los retratados. Tal inexpresividad es signo de la ambivalencia del arte pop, más comúnmente asociado con Warhol, pero igualmente aplicable en este caso a Avedon.
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