Emil Nolde
Trollhois Garten, 1907
óleo sobre lienzo
73,5 x 88 cm
Emil Nolde
Am Weintisch, 1911
óleo sobre lienzo
88,5 x 73,5 cm
Emil Nolde. Esplendor de colores. Museo Frieder Burda ‘Emil Nolde. El Esplendor de los Colores’ es el nombre de la exposición veraniega que el Museo Frieder Burda organiza del 15 de junio al 13 de octubre de 2013.]]>
Fuente: Museo Frieder Burda
La exposición es la primera gran presentación de la obra de Nolde en el sur de Alemania en muchos años. Comprende alrededor de sesenta pinturas al óleo y unas veinte acuarelas que datan desde el comienzo de su carrera artística hasta sus últimos años. La exposición se desarrolla en colaboración con la Fundación Nolde Seebüll y será comisariada por Manfred Reuther, ex-director de la Foundation Nolde. Emil Nolde (1867-1956) es uno de los artistas más importantes del expresionismo, y esta exposición incluye los principales temas de su obra creativa. Además de paisajes, la muestra incluye retratos y obras de temática religiosa, además de bocetos de su viaje al Mar del Sur.
Estas pinturas de colores exuberantes revelan la complejidad de la vida y el arte de Nolde. Lo que todos ellos comparten es el poder emocional del color. Manfred Reuther explica: «Desde el comienzo de su obra pictórica, el desarrollo artístico de Nolde fue el camino al color como el recurso de expresión definitivo, que cada vez dominaba más.» Nolde estaba convencido: «Los colores fueron una alegría para mí, y me sentí como si ellos amasen mis manos«. Sus coloridas pinturas y acuarelas dan testimonio de su afinidad con la naturaleza y la búsqueda de los estados humanos primitivos. El azul marino, el rojo radiante, el negro profundo y el intenso lila son algunos de los colores expresivos que Emil Nolde utilizó para pintar paisajes románticos y espectaculares paisajes marinos.
«Me encanta la música de los colores»
Manfred Reuther: «En el desarrollo artístico de Nolde, el fenómeno del color no fue provocado por motivos externos, no estaba preparado o guiado por las escuelas teóricas de la época, sino que su propensión para el color era un don natural latente, una inclinación cualitativa que poseía desde el principio y que siempre buscó evolucionar. Ya de niño, el joven Nolde era consciente de su necesidad inherente de pintar, y de su talento especial. Confesó de joven que su deseo secreto era llegar a ser pintor. Recordó su primer uso creativo de colores en su autobiografía: ‘En la escuela, pinté sobre todas las ilustraciones de mi Biblia, y aún después siempre viví en la alegría de color.‘»
Numerosas acuarelas
Además de sus pinturas al óleo de colores exuberantes, las numerosas acuarelas de Nolde reflejan su afán de experimentar. Manfred Reuther explica: «Sus acuarelas se caracterizan por una extraordinaria diversidad. La cualidad única de las acuarelas permitió su búsqueda de la espontaneidad y la expresión directa«.
Contenido relacionado
Matta: Ficciones en el Museum Frieder Burda (exposición, 2013)
Follow us on: