Käthe Kollwitz: Tragedia y compromiso en el MoMA

Del 31 de marzo al 20 de julio de 2024, el Museo de Arte Moderno presenta la primera retrospectiva dedicada a Käthe Kollwitz en un museo neoyorquino y la primera gran exposición internacional de su obra en Estados Unidos en más de 30 años.

Fuente: Museo de Arte Moderno – Imagen: Käthe Kollwitz, Mujer con niño muerto (Frau mit totem Kind), 1903. Aguafuerte con chine collé. Placa: 41,2 × 47,1 cm; hoja: 21 7/16 × 27 11/16″ (54,5 × 70,3 cm). Museo de Arte Moderno de Nueva York. Adquirido gracias a la generosidad de los Contemporary Drawing and Print Associates. © 2018 Artists Rights Society (ARS), Nueva York / VG Bild-Kunst, Bonn.

«Käthe Kollwitz» presenta una exploración centrada en la carrera de la artista en aproximadamente 120 ejemplos raramente vistos de sus dibujos, grabados y esculturas extraídos de colecciones públicas y privadas de Estados Unidos y Europa. Organizada cronológicamente, la exposición traza el desarrollo de la obra de Kollwitz desde la década de 1890 hasta la de 1930, un periodo de agitación sin precedentes en la historia alemana marcado por los males sociales de la industrialización a finales del siglo XIX y los traumas de la guerra y la agitación política a principios del siglo XX. Ejemplos cruciales de los proyectos más importantes de la artista muestran su compromiso con temas socialmente críticos, y selecciones clave de estudios preparatorios y pruebas de trabajo pondrán de relieve su proceso creativo. La organización de «Käthe Kollwitz» corre a cargo de Starr Figura, Conservadora, y Maggie Hire, Asistente de Conservación, Departamento de Dibujos y Grabados.

Käthe Kollwitz (alemana, 1867-1945) nació en la ciudad prusiana de Königsberg (actual Kaliningrado, Rusia). Se formó inicialmente como pintora, pero pronto se decantó por el dibujo y el grabado, que consideraba los medios más eficaces para la crítica social. También trabajó ocasionalmente en escultura. En las primeras décadas del siglo XX, cuando muchos artistas experimentaban con el lenguaje de la abstracción, Kollwitz siguió comprometida con la figuración y con un arte de finalidad social. En una época en la que las figuras más destacadas en todos los campos eran casi exclusivamente hombres, fue ampliamente reconocida como una de las artistas gráficas más destacadas de la historia, y se convirtió en una de las pocas mujeres artistas que alcanzó renombre internacional en vida.

Como mujer que se enfrentaba a las injusticias de su época, Kollwitz reivindicó radicalmente el punto de vista femenino como agente necesario y poderoso para el cambio. Inquebrantable en su búsqueda de la honestidad emocional, reelaboró continuamente sus temas centrales de la maternidad, el dolor y la rebelión de una obra a otra. Su ímpetu estaba alimentado por una audaz ambición artística y por su dedicación a dar visibilidad a las mujeres y a la clase trabajadora. Figura explica: «Kollwitz forjó un arte de compasión y conciencia social que resuena tan poderosamente hoy como lo hizo en vida, y esta exposición pretende reintroducirla en un momento en que su compromiso con el cambio social y político tiene una relevancia renovada, incluso urgente«.