Regina Silveira: «Octopus (Track Series)«, 2009
Vinilo y madera, dimensiones variables
Courtesy Alexander Gray Associates, Nueva York
Manfred Bocklemann: «Horizonte«, 2003
Acuarela sobre papel de periódico
Cortesía del artista
Deconstruyendo al Espectador en el Courtauld Institute La Bienal del Courtauld Institute of Art presenta ‘Interacción: Deconstruyendo al Espectador’, una exposición que busca desafiar la percepción tradicional del espectador y el lugar que éste ocupa. Del 25 de enero de 2014 al 13 de julio de 2015.]]>
Fuente: Courtauld Institute of Art, London
No somos artistas, sino historiadores de arte, comisarios y críticos: espectadores. Organizada conceptualmente, la undécima instalación de esta serie bienal organizada por el Courtauld Institute ofrece una oportunidad para que las jóvenes mentes curatoriales puedan trabajar con artistas contemporáneos. Los artistas de INTERACT asumen el papel del espectador: algunos invitan a interactuar con las obras con el fin de realizar y superar este rol preconcebido, mientras que otros plantean diferentes preguntas y términos de referencia.
La percepción visual asume diferentes roles, y es particularmente importante en las obras de Emilie Pugh, Bridget Riley y Sebastián Brajkovic. Cada uno de ellas manipula la comprensión óptica como intervenciones visuales. Los dibujos de Julie Mehretu exigen al espectador moverse hacia atrás y adelante en el espacio con el fin de descifrar las capas de referencias, técnicas y significado que las obras contienen.
Desprivilegiando el campo visual, la conciencia corporal de los espectadores y otras sensaciones se convierten en su aparato crítico cuando los espectadores se enfrentan a la obra de Katie Paterson, que requieren una apreciación sensible de la importancia del sonido.
El contexto espacial (y cultural) de los espacios del Courtauld Institute influye en el papel de espectadores, convirtiéndose en un espectador en si mismo. En la creación de un espacio de reflexión, a través de la obra de Tina Gonsalves, la propia imagen del visitante es la protagonista del espacio expositivo. Por lo tanto, la confrontación de los espectadores con ellos mismos será mediada por la obra artística, estableciendo los términos con los que se enfrenta su propia perspectiva. La identidad es el punto enigmático de convergencia de estas obras, que incluye las fotografías evocadoras de Cordelia Donohoe y Liu Bolin. La icónica ‘Untitled (Ross)’ de Felix Gonzalez-Torres también sirve como convergencia entre las identidades personal y pública, y la interacción entre ambas.
A través de una orquestación sutil del espacio, movimiento y percepción, el entorno aparentemente oscuro del Instituto Courtauld se convierte en una muestra internacional de arte contemporáneo. Al mismo tiempo, se trata de un encuentro con el arte en el que -para un espectador comprometido- la interacción consciente es llevada a una posición de prominencia.
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