Rafael: Estudios de cabezas y manos, y esbozos tras Leonardo, c. 1505–7, 21 x 27.4 cm © Ashmolean Museum, University of Oxford
Ashmolean Museum presenta ‘Rafael: Los Dibujos’ 120 obras de Rafael, procedentes de colecciones internacionales, se exponen en el Ashmolean en la importante exposición ‘Rafael: Los Dibujos’. Del 1 de junio al 3 de septiembre de 2017.]]>
Fuente: Ashmolean Museum
Cincuenta obras provienen de la propia colección de Ashmolean, el grupo más grande e importante de dibujos de Rafael en el mundo. Llegaron en 1845, después de un llamamiento público para adquirirlos tras la dispersión de la colección del pintor Sir Thomas Lawrence (1769-1830), que había reunido una colección incomparable de dibujos de antiguos maestros. El Museo Albertina de Viena, que mostrará la exposición en el otoño de 2017, aportará otras 25 obras. Los dibujos restantes provienen de colecciones internacionales e incluyen «Cabeza de una musa» (colección privada), que rompió récords cuando subastada en Christies en 2009.
Xa Sturgis, Director del Ashmolean Museum, declaró: ‘Nunca desde 1983, cuando una exposición de dibujos de las colecciones británicas tuvo lugar en el Museo Británico, se ha mostrado al público una reunión tan extraordinaria de dibujos de Rafael. La generosidad de museos y coleccionistas nos ha permitido dar a la gente una oportunidad única de experimentar el poder visual y emotivo de la mano de Rafael, y de comprender su genialidad.’
Los 120 dibujos que se exponen muestran toda la breve pero brillante carrera de Rafael, llevando a los visitantes desde su primera carrera en Umbria, pasando por sus años radicalmente creativos en Florencia, hasta el momento en que estaba en el apogeo de sus poderes en Roma, trabajando en obras como los frescos del Vaticano. La exposición pretende transformar nuestra comprensión de Rafael a través del enfoque en la inmediatez y la expresividad de su dibujo. Se muestra cómo Rafael, a lo largo de su carrera, se dedicó a una intensa búsqueda –mediante el dibujo- de las posibilidades de expresión que le permitiría cumplir sus ambiciones de largo alcance. Rafael a menudo investigó y refinó sus ideas a través del proceso y los materiales del dibujo, de maneras más sutiles o más aventuradas de lo que aparecerían en sus pinturas, como en su retrato de un santo juvenil (1505-7) que evoca no sólo una forma escultórica, sino un carácter enigmático y difuso.
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